La sociedad de los hombres está
dividida en tres culturas muy diferentes las unas de las otras, no se sabe a
ciencia cierta cuando aparecieron sus primeros miembros, pues nadie se encargo
de dejar constancia de aquel hecho. Lo que sí se sabe es que no tardaron mucho
más que los elfos en habitar Zharegron.
La más numerosa y extendida de estos,
recibe el nombre de Aldeanios, o como el resto de razas los llaman, los hombres
comunes.
Humanos que habitan grandes ciudades a lo largo y ancho de los tres
continentes, salpicando todos ellos con infinidad de pueblos, aldeas y
asentamientos. Una sociedad que se distingue por sus marcadas clases sociales,
desde grandes nobles inmensamente ricos, pasando por ciudadanos de nivel medio,
a granjeros y tenderos humildes, hasta miembros que viven en la más absoluta
pobreza.
Para enanos y elfos el mundo de los
hombres está corrompido, pues consideran a muchos de sus miembros egoístas,
débiles, e interesados, capaces de cualquier cosa con tal de obtener un
beneficio propio, aunque eso signifique perjudicar o hacer daño a sus hermanos.
Hermandades de asesinos y ladrones, estafadores, políticos corruptos y demás
tipos de hombres que subsisten gracias al mal ajeno, anteponiendo sus
necesidades ante todo.
Sin embargo también hay hombres que
luchan por la justicia y la igualdad.
Caballeros de relumbrante armadura
montados sobre nobles corceles de guerra, que blanden espadas y escudos,
grandes defensores de la justicia.
Soldados honorables que defienden el bien común, o simples hombres que
tratan de hacer de su mundo un lugar mejor y más igualitario.
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